disfrutar de nuestro trabajo

Pasó la noche, se abren las cortinas de luz en el horizonte de un nuevo día y comenzamos nuestra tarea; a algunos le pudiera parecer largo y tedioso el trabajo que tienen que realizar, un peso muerto que quisieran quitárselo de encima, pero mala cosa es comenzar el día con ese pesimismo. Amamos la vida y tendríamos que amar aquello en lo que desarrollamos lo mejor de nosotros mismos que es el trabajo, ponerle ilusión, disfrutar de aquello en lo que estamos realizándonos, porque eso tiene que ser nuestro trabajo; es una tarea constructiva donde vamos plasmando nuestro yo, nuestra personalidad, nuestros valores; no buscamos solo una retribución material, sino esa satisfacción interior que hará que le pongamos más corazón, más intensidad de vida a lo que hacemos, porque no nos contentamos con cumplir sino que estamos dando el cien por cien de lo que es toda nuestra riqueza interior; sabremos entonces arrancar amarguras y pesadumbre de nuestros trabajos, poniendo una alegría nueva a la vida. Aprendamos a disfrutar de nuestro trabajo y le pondremos una dosis hermosa de alegría y de optimismo a la vida. © carher