un perfumado jardín y una melodía musical

Estamos saliendo de una noche de sueño y de descanso y renovados comenzamos la tarea de un nuevo día. Todos deseamos, y de ahí es la fórmula de nuestro saludo mañanero, tener un buen día, un buen día lleno de felicidad, una felicidad que hemos de ser capaces de buscar y construir; unos fuertes cimientos hemos de poner que sean en verdad camino de plenitud para nuestra vida. Buscamos realizarnos a nosotros mismos desarrollando nuestros valores y cualidades, pero la verdadera plenitud no está solamente en alcanzar lo mejor de mí yo, sino siempre estar en relación con un tú porque cuando en verdad hacemos un nosotros es cuando mayor plenitud tenemos para nuestra vida; no somos seres aislados sino que estamos llamados a la relación personal y es lo que hemos de construir cada día; el cimiento más hermoso que nos lleva a esa comunión es el del amor; sembremos hermosas semillas que hagan florecer el amor en nuestras mutuas relaciones, dejemos siempre a nuestro paso las huellas de nuestra ternura, hagamos de nuestro mundo un perfumado jardín con la delicadeza de nuestros gestos, que suene la armonía del cariño que vamos desparramando como una sinfonía musical que alegra los corazones y a todos nos hace más felices. © carher