liberarnos de los ramajes que restan energía

Hay ocasiones en que al despertar por la mañana se nos presenta un día farragoso y enmarañado, por una parte en ocasiones el programa del día se nos llena de cosas pero junto a ello nuestro espíritu se ve envuelto por tensiones y nervios que provocan en nosotros agobios innecesarios, tenemos que saber liberarnos de tantos ramajes que nos envuelven y que nos pueden chupar la energía que necesitamos para emprender aquellas tareas realmente fructuosas, descargar las tensiones que llevamos en nuestro interior o que recibimos desde la influencia de lo que nos rodea, encontrar serenidad de espíritu para saber escoger lo mejor, equilibrio y ecuanimidad para dejar un lado lo que es menos necesario, hacer que nuestro encuentro con los demás sea siempre enriquecedor, no dejarnos influenciar por lo negativo, nuestros caminos serán siempre de luz para que nunca nos sintamos turbados por las sombras. Haremos un día verdaderamente fructuoso.