Vaya un saludo lleno de afecto en este último día del mes que venga a reafirmar esa amistad y cercanía que hemos ido logrando a través de este medio; a mí me encanta estar en contacto con otras personas, otras culturas, otros lugares porque también me siento enriquecido en esa mutua comunicación; quiero ir siempre con un corazón noble en mis manos sin ningún tipo de prejuicio y si alguno tuviera es pensar en la bondad de aquel con quien estoy hablando; es bueno ir por la vida con corazón abierto, no temamos los contratiempos que podamos encontrar porque sabemos que somos diferentes, podemos tener una distinta manera de pensar, pero en esa comunicación y en esa variedad está la belleza de la amistad y el enriquecimiento de la persona; te deseo todo lo mejor para este día queriendo dejar una buena semilla en tu corazón y el perfume de mi amistad que te acompañe. Buenos días. © carher
Hay días que nos despertamos con recuerdos inigualables que nos llenan de ricas sensaciones, otras veces nos vienen a la mente experiencias enriquecedoras que nos llenan de motivos para seguir enfrentandonos a la vida, en otras ocasiones serán como mojones que van marcando el camino, momentos llenos de inquietud que nos acercan a un futuro incierto e impredecible, unos y otros nos hacen sentirnos con coraje para afrontar lo que cada día la vida nos va ofreciendo, ni nos dormimos en laureles ni nos sentimos frenados por una posible inseguridad con que nos encontremos en el camino de la vida, luchamos por no perder la ilusión, nos sentimos estimulados por cuanto de bueno hemos vivido en la vida que lo convertimos en buen presagio de lo que nos pueda suceder, miramos el camino con optimismo sin perder la alegría, queremos seguir dando pasos firmes y seguros, buscamos darle hondura a la vida y a cuanto hacemos, sentimos que todo tiene una trascendencia y que será importante cada paso que demos, no perdemos nuestra dignidad y marcamos la diferencia en el respeto que sentimos por cuanto nos rodea valorando por encima de todo a las personas con las que vamos haciendo el camino. Necesariamente tiene que ser un día bello. Buenos días. © carher
Buenos días, tengo que confesarte que cada mañana me despierto con la ilusión de poderte enviar este saludo que sea como un faro de esperanza y optimismo en los caminos de tu vida; ya desde la noche estoy pensando qué puedo decirte y busco las palabras más agradables y estimulantes para que a ti y a muchos les cree también una ilusión en la vida; los caminos muchas veces se nos vuelven tortuosos, nos trazamos metas desde nuestros sueños y posibilidades, ponemos esfuerzo en ir construyendo la vida según ese plan previamente trazado, desarrollamos valores y cualidades, pero algunas veces se nos hace difícil porque surge una enfermedad, nos sucede un accidente, o aparece algo imprevisto y nos puede parecer que todo se viene abajo; si tenemos claro a dónde queremos llegar con toda nuestra fuerza interior iremos sorteando las dificultades, porque además siempre vamos a encontrar a nuestro lado en ese camino personas buenas que nos tienden una mano, nos acompañan en ese momento oscuro y nos hacen sentir que no estamos solos; valora y agradece siempre esa mano tendida, esa mirada que te estimula, esa palabra que te alienta y no olvides serlo tú siempre de la misma manera para los demás; que no nos falte esa ilusión en la vida que os haga luchar siempre con esperanza. Buenos días. © carher
Buenos días es algo más que un deseo, es decirte que es para mí una alegría encontrarte y poder saludarte y saber que estás bien, es querer decirte que disfruto de tu compañía, que tus alegrías son mis alegrías, que tus preocupaciones y tus lágrimas también las llevo en el corazón, que tu ilusión por la vida me llena a mí también de esperanza, que es un gozo poder caminar juntos y entonar la canción de la alegría, que tus palabras y tus risas son música en mi corazón, que tu mirada luminosa enciende fuego en mi espíritu; es bella la vida, sigamos disipando sombras, hagamos brillar el sol en los corazones de los que nos rodean, pongamos la dulzura de nuestra ternura en nuestros pasos, vayamos destilando amor con nuestras palabras y sonrisas para hacer florecer cada vez más hermosa la vida, disfrutemos de ese bello jardín en el que no dejemos que los abrojos de amarguras y resentimientos enturbien su belleza, sintámonos felices de verdad con lo que somos y vivimos. Buenos días. © carher
Con los primeros rayos del sol despertamos y nos levantamos para recomenzar de nuevo nuestras tareas de cada día mientras vamos escuchando el saludo de los buenos deseos que recibimos de quienes están cerca de nosotros; pero despertar no es solo salir del sueño del descanso de la noche sino que es levantarnos para algo más que hemos de realizar en la vida, es ponernos en camino, es comenzar de nuevo a sintonizar con la vida, es afrontar nuestras tareas y responsabilidades con toda seriedad dejando a un lado muchas superficialidades que nos pueden envolver; la desgana nos acecha, la tentación de una vida cómoda y sin esfuerzo se hace presente muchas veces, el dejar pasar o dejar para otro momento lo que hemos de hacer son estados de ánimo que se apoderan de nosotros, el descuidar nuestro crecimiento humano y espiritual es algo que se nos contagia del ambiente que nos rodea, el no poner los cimientos de unos buenos valores que sostengan el edificio de nuestra vida es una tentación fácil en la que fácilmente podemos caer; tenemos que darle buenos cimientos a nuestra vida cuidando nuestra preparación y preocupándonos de esa madurez que tendríamos que alcanzar; despertémonos, sacudámonos esas modorras que retrasan nuestro camino, levantémonos con ganas de alcanzar las mejores metas que nos conduzcan hacia una plenitud de vida. Buenos días. © carher
Cuando al despertar contemplamos el día que se nos presenta por delante algunas veces nos parece que va a ser un día anodino, sin nada especial, y nos encontramos como ante una página en blanco sin saber que escribir en ella sino esas cosas simples de cada día; pero para que el día tengo un sentido y valor no es necesario llenarlo de cosas extraordinarias, simplemente vive tu día, vive cada instante, disfruta de cada momento, siéntete contento con eso que estás haciendo cada día, fíjate en pequeños detalles de lo que sucede, detente a contemplar lo que te rodea, admira la belleza de las cosas sencillas, valora esas personas que están a tu lado o con la que te cruzas en el camino, siéntate a hablar con los amigos, respira serenamente dejando que el aire llegue a tus pulmones, siente esa brisa agradable que refresca tu rostro, escucha con atención los ruidos que se sienten en la lejanía; vive, eso es algo grande y aunque sea pequeño es maravilloso, harás agradable tu día. Buenos días. © carher
Los cortinajes oscuros de la noche se descorren en el horizonte para dar paso a un brillante sol en este día de San Juan; quizás nos dormimos anoche entre recuerdos y rememoración de costumbres ancestrales, pero lo importante es cómo nos despertamos hoy con deseos de llenarnos en plenitud de los mejores rayos luminosos del sol; luz sin embargo que vamos a encontrar en el resplandor de vida de aquellos que también con ilusión caminan a nuestro lado luchando por un mundo mejor; ilusión que tiene que resplandecer también a nosotros con la que contagiar a quienes aún siguen transitando caminos oscuros en medio de sus preocupaciones y problemas, es la alegría por la vida que hemos de saber transmitir desde nuestro optimismo para que no nos vuelvan a envolver sombras de desánimo y de aburrimiento; hagamos que nuestros días sean luminosos y nuestros ojos estén siempre llenos de luz para descubrir siempre todo lo bueno que podemos encontrar en los demás; vayamos repartiendo sonrisas que hagan florecer caminos de felicidad para todos, allí haremos resplandecer el mejor sol para nuestras vidas. Buenos días.© carher
Al darte hoy mi saludo no quisiera que mi palabra y mi voz fuera la de un solista que canta por su lado una canción, sino que entre todos formemos una hermosa coral para entonar la melodiosa armonía de la vida; distintas voces, es cierto, llegan a formar una coral cada uno cantando su propia melodía pero haciéndolo en armonía con los demás, las diferentes voces no son disonancias, ninguno voz desentona, sino que cada voz con su melodía tiene su lugar y sabe armonizarse con los demás; así en la vida las diferencias no tienen que hacer disonancias sino buscar siempre armonía entre todos; no estamos para hacer callar al que disciente sino para armonizar recogiendo lo mejor de cada uno, no somos quiénes para juzgar ni para condenar al otro porque sea diferente; cuando la plantilla sobre la que construimos la vida es el amor sabremos respetarnos, sabemos aceptarnos y sabremos construir juntos cada uno con la calidad de su piedra; cuando sabemos colaborar podremos hacer en verdad que nuestro mundo sea mejor; valorando lo que cada uno puede aportar le ayudamos a realizarse y ser más feliz, así entre todos seremos más felices, construiremos un mundo mejor. Buenos días. © carher
Despertamos un día más para iniciar el camino de un nuevo día después del relajante descanso de la noche, con brío queremos enfrentarnos a la vida pero queremos también afrontar lo que es la vida que nos rodea en todas sus consecuencias; es cierto que queremos ser felices y desearíamos también que los que están a nuestro lado vivan esa dicha de la vida, pero somos conscientes también del sufrimiento de tantos que caminan a nuestro lado y en la sensibilidad de nuestro corazón no podemos desentendernos; tenemos la tentación en ocasiones de mirar para otro lado, de no querer enterarnos, de echarle la culpa a los demás, de decir que son otros los que tienen que resolver esos problemas, pero si tenemos al menos una mediana sensibilidad, si realmente hemos madurado en la vida como personas, no podemos sentirnos ajenos a cuanto sucede a nuestro lado, nuestro compromiso humano nos lleva a acercarnos a quien sufre, a decir a lo menos una palabra de consuelo, a manifestar nuestra presencia llena de cariño y cercanía, pero también a poner nuestro pequeño pan que dé ánimo al caminante, el pan de nuestro cariño y nuestra presencia, el pan de nuestro compromiso que como granito de arena podemos poner para despertar esperanza, el pan que siembra la ilusión de que es posible algo distinto, el pan que puede ser estímulo para que a muchos se les despierte la esperanza y comiencen a levantarse de su camilla de postración; muchos pueden ser los detalles con los que vayamos manifestando nuestro amor dejando el perfume de nuestra ternura. Hagamos que sea un buen día embriagado de amor. Buenos días en este día del Corpus que tiene que ser fiesta de amor. © carher
Que lo pases bien, de alguna manera queremos decir cuando damos los buenos días a alguien; sí, queremos que lo pase bien pero ¿qué entendemos por pasarlo bien? Quizás nos afanamos algunas veces por tantas cosas que quisiéramos tener para pasarlo bien que al final esos agobios no nos darán esa paz y esa serenidad para saber disfrutar de nuestro día; esos afanes nos hacen sentir inquietos por dentro, agobiados en la búsqueda de cosas y perdemos esos pequeños detalles que podemos encontrar en el camino de la vida o en tantas personas que nos rodean que nos darían satisfacciones muy hondas; aprendamos a valorar lo que tenemos en nuestras manos empezando por nuestro tiempo, valoremos esos gestos de cariño y de amistad que nos ofrecen los que están cerca de nosotros; disfrutemos de esa sonrisa o de esa palabra amable que nos ofrece aquel con quien nos cruzamos en el camino; saborea esa comida que has preparado o esa agua que calma tu sed, esa sombra que encuentras en el camino, o esa brisa de aire fresco que te hace sentirte a gusto; sé agradecido con lo que puedes ir aprendiendo de la vida incluso de los momentos difíciles, pero también esos gestos de generosidad y disponibilidad que encontramos en tantos que son un ejemplo y un aliciente para nuestro caminar; no son necesarias cosas extraordinarias para darnos cuenta de lo maravillosa que es la vida a pesar incluso de las sombras que podamos encontrar, todo es lección y estímulo para ese paso nuevo que hemos de dar al encuentro de nuestra felicidad. © carher
De nuevo el sol comienza a iluminar un nuevo día desde el horizonte, despertamos con la ilusión de retomar las tareas de cada día, de seguir con la construcción de nuestra vida pero no olvidemos que hemos de poner cimientos que fundamenten nuestra existencia; son esos valores, que no es lo que llevamos en el bolsillo, pero que son los que van a dar carácter y sentido a lo que hacemos, unos valores que se ahondan en nuestro espíritu, que dan fortaleza a nuestra vida, que nos hacen mantener la esperanza; esa generosidad y disponibilidad que no es solo un adorno, esa sinceridad y autenticidad con que actuamos, esa rectitud para buscar y valorar siempre lo recto y justo, ese respeto que nos hace valorar la dignidad de todo ser humano sea quien sea, esa alegría y optimismo con que afrontamos la vida a pesar de las dificultades, ese espíritu de superación que nos hace constantes en nuestra lucha para ser mejores cada día, esa responsabilidad en nuestra vida familiar y laboral así como en nuestra presencia en la sociedad, ese corazón acogedor que va haciendo amigos que son hermosa riqueza para nuestra vida, y siempre el amor y el cariño que se destila de nuestro corazón y que da sentido a cuanto hacemos y que va poniendo ternura en la vida; cuidemos pues esos cimientos que dan belleza y grandeza a nuestra vida. Buenos días. © carher
Buenos días es el saludo con que llego a tí cada mañana, te invito a que tú también envíes tus buenos días a tus amigos y cuantos conozcas porque es una señal de amistad y quien lo recibe está diciéndose que tú has pensado en él, que lo tienes en consideración, algo que llena siempre de gozo el espíritu, sabernos en el corazón del otro, en fin de cuentas que somos queridos y amados, y eso da nuevos ánimos en la vida para caminar y enfrentarse a la realidad de cada momento; es una lástima que nos vayamos cruzando en la vida y ni siquiera nos dediquemos una mirada o una palabra amable, pasemos indiferentes los unos a los otros, vayamos así creando un mundo de insensibilidad incluso entre los que vivimos más cercanos; mira a los ojos cuando te cruzas con alguien, deja el buen sabor de una sonrisa, regálale un buenos días, creemos un mundo de cercanía, allanemos los caminos que hacen amistad, pongamos cimientos para un mundo mejor. Te repito queriendo que salga del corazón, buenos días. © carher
Ha amanecido un nuevo día, el sol entra generoso y brillante por nuestra ventana, nos invita a ponernos en camino, abre tu corazón con generosidad, comparte vida, ilusión, esperanza, alegría, siéntete renovado interiormente y renueva con tu generosidad el mundo que te rodea sabiendo compartir todo lo bueno que llevas en tu vida, es la disponibilidad de saber desprenderte de lo que sea necesario para ayudar a los demás, quien siembra con generosidad cosechará con abundancia, deja a un lado la mezquindad que nos hace insolidarios, no solo son cosas materiales lo que podemos compartir, una sonrisa luminosa, una mirada atenta, un detenerte en el camino aunque tengas prisa, un saber escuchar, una palabra amable, una mano alentadora sobre el hombro, un abrazo de amistad, serás así un sol brillante que va iluminando caminos. Buenos días. © carher
Es bonito despertar con el corazón y la mente desbordantes de ilusiones, la vida nos parece más bella, nos sentimos con fuerza para afrontar las luchas y las dificultades que cada día podemos encontrarnos, nos hace que podamos mantener la paz en el corazón a pesar de los contratiempos que muchas veces no pueden llegar incluso de las personas más cercanas, nos hace soñar con cosas nuevas y bellas y aunque al final no siempre lo veamos realizado, pero sin embargo nuestro espíritu ha estado lleno de alegría y entusiasmo en esa ilusión; una ilusión grande es saber que podemos contar con los amigos, sí, amigos, personas que nos queremos y tenemos confianza, que caminan a nuestro lado aunque a veces vayan en silencio, con lo que podemos contar para desahogar lo que llevamos dentro o para soñar en esas cosas nuevas y bonitas que todos deseamos, con los que compartimos no solo cosas sino hasta lo más profundo de nosotros mismos, quienes nos dicen la palabra oportuna en el momento que lo necesitamos ya sea de corrección ya sea de estímulo valorando lo que hacemos y diciéndonos que es posible dar un paso más, con los que tenemos siempre las puertas abiertas porque abierto tenemos el corazón para ellos, a los que comprendemos y ellos nos comprenden en esos momentos difíciles que siempre aparecen en la vida, de los que adivinamos aunque no nos lo digan las ilusiones que llevan en el corazón. No pierdas de ninguna manera esa ilusión en el despertar de cada día. Buenos días. © carher
Tras la tranquilidad y el silencio del descanso de la noche al comenzar un nuevo día casi quisiéramos quedarnos para siempre en ese mismo estado de serenidad y de paz; pero tenemos que levantarnos para iniciar nuestras tareas, volver al corre-corre de la vida y de alguna manera tememos encontrarnos con momentos de tensión y situaciones que nos puedan hacer perder la paz; son fáciles los desencuentros y desavenencias con algunas personas y que en nuestro corazón aparezcan reticencias y resentimientos; no perdamos la paz, no tomemos en nuestras manos la antorcha de la violencia que algunos puedan ofrecernos con sus actitudes, no entremos en esa espiral sino que en medio de ese engranaje pongamos por medio una flor que suavice la tensión, que la ternura que fluye de nuestro corazón derrita esa actitud que tan fácilmente encontramos; que seamos en verdad instrumentos de paz en medio de las tensiones con nuestra serenidad ofreciendo siempre un generoso y valiente perdón, respondamos siempre palabras de paz; son pasos importantes para lograr ese mundo mejor que todos deseamos. Buenos días y no perdamos nunca la paz. © carher
Cada amanecer es una oportunidad nueva, un día más con muchas posibilidades, de sentir de nuevo latiendo la vida, de ver ya más cercanos nuevos horizontes que se abren a nuevos retos y desafíos; unos retos y desafíos que cada uno ha de sentir en lo más hondo de sí mismo, porque cada uno va haciéndose su vida, construyendo un nuevo y hermoso edificio con los valores y cualidades que tiene a su mano; en ocasiones podemos sentirnos miedosos, temerosos ante lo que nos espera, ante lo que pueda surgir de forma inesperada, ante lo que nos va ofreciendo la vida, ante lo que significan los encuentros que vamos realizando con los demás; sintámonos valientes para afrontar esos desafíos, tenemos más energía en nosotros de lo que podemos imaginar, asumamos la tarea de hacer algo bello de tu vida de cada día, algo que haga más bello tu mundo, algo que nos haga repartir felicidad a los que están a nuestro lado; ojalá al final del día nuestras manos estén llenas de todo lo bueno que hemos sido capaces de hacer, ojalá podamos contemplar ojos más luminosos en aquellos que nos rodean y en lo que con nuestro granito de arena de ilusión y de esperanza nosotros habremos podido contribuir, sintamos la satisfacción de ese mundo nuevo que estamos intentando construir. Buenos días. © carher
