cada día una bendición y un regalo

Cada día es una bendición, cada día es un regalo, y los regalos se reciben con sorpresa, con alegría, con agradecimiento; con manos temblorosas llenas de emoción vamos abriéndolo poco a poco, nuestro rostro y nuestro corazón se va encendiendo con una nueva luminosidad según vamos descubriendo lo que recibimos; así comenzamos nuestro día con esa ilusión de lo nuevo que se nos ofrece, con ese deseo de poder disfrutarlo, con ese entusiasmo por darle una fructuosa utilidad, con esas posibilidades nuevas que tenemos en nuestras manos; es la riqueza de la vida, es nuestra iniciativa y creatividad capaz de grandes cosas, es el gozo de las personas que nos rodean, es el disfrute del mundo en que vivimos, es el jardín florido de la amistad, es la bendición que viene a nuestra vida. Que tu presencia sea también bendición y regalo para los que caminan a tu lado. Buenos días. © carher