despertar con ojos de niño

Quisiera hoy despertar con ojos de niño, curiosos y limpios de malicia, ávidos de ver, conocer y buscar cosas nuevas, de nuevos encuentros y amistades, para gozarme en el cariño de los que me rodean, quedarme extasiado ante el rayo del sol que comienza a brillar en el horizonte, disfrutar de la suave brisa que acaricia mi rostro, quedarme quieto y en silencio escuchando el alegre el trino de los pájaros, quedarme absorto ante las cosas pequeñas que me rodean, no ser indiferente y dejarme sorprender por lo que pueda parecer insignificante a mi alrededor; hemos crecido y algunas veces parece que nos hemos endurecido y perdido sensibilidad, necesitamos volver a esa mirada inocente y sin malicia, tenemos que afinar de nuevo las cuerdas sensibles de nuestro corazón para que vuelva a sonar la canción de la ternura en nuestra vida, pongamos colirio en nuestros ojos para que siempre sean luminosos contemplando cuanto de bueno sucede en nuestro entorno, limpiemos nuestros oídos para poder escuchar mejor los gemidos de los que sufren a nuestro lado, pongamos en nuestras manos la crema que las suaviza para que sean siempre acogedoras, sepamos construir un mundo nuevo y lleno de luz y de felicidad. Buenos días. © carher