seamos buenos agricultores de la vida

El sol se abre paso en el horizonte, el campo de la vida nos está esperando, un nuevo día para que lo trabajemos y lo disfrutemos y al final obtengamos los mejores frutos, en nuestras manos está el cuidado que pongamos en el cultivo de nuestra vida, preparemos bien el terreno para la semilla que hemos de sembrar cada día, hemos de cultivarnos bien a nosotros mismos arrancando de nosotros las malas hierbas de nuestros caprichos y rutinas, no permitiendo que crezcan malévolamente nuestro amor propio y nuestro orgullo que frene nuestra generosidad, abonando con los mejores valores que hagan florecer nuestra bondad y nuestra empatía con los demás, dejando que el calor del sol de nuestro amor nos llena de vitalidad, humedeciendo nuestras raíces en una rica espiritualidad, valiéndonos también del apoyo de los amigos y los que nos rodean para mantener erguida nuestra vida y sanos nuestros frutos, dando sombra con nuestro cariño y ternura a los que están a nuestro lado, que la frondosidad de nuestro entusiasmo y alegría se convierta en acogida al mismo tiempo que estímulo para todos, el campo de nuestra vida se convertirá en un vergel hermoso que produzca buenos frutos de felicidad para los que nos rodean. Buenos días. © carher