cada amanecer una bendición

Amaneció un nuevo día y nos sentimos bendecidos con el don de la vida y elevamos nuestro corazón agradecido a Dios bendiciendo su santo nombre, nos ponemos en camino en un día que queremos llenar de bendiciones, valorando la vida en cada instante, en cada momento, en cada cosa que vamos realizando, en cada encuentro con los demás, disfrutando de tantas cosas hermosas que componen la vida; hagamos que sea un día de bendición en las semillas hermosas que vamos sembrando en el campo de la vida con nuestros valores y con nuestra actitud de servicio y de disponibilidad; dejemos a nuestro paso el perfume de la generosidad de nuestro corazón, de nuestros buenos sentimientos, como dice ahora, de las buenas vibras que vamos despertando en los que caminan de nuestro lado; seamos sembradores de esperanza, contagiando nuestra ilusión y nuestra alegría, abriendo caminos de felicidad para todos; que por nuestro buen hacer seamos también bendición para los que nos rodean. © carher